Tu señor, que eres amo y verdugo,
Escúchame y permanece.
Tu, que todo lo contemplas de reojo, quédate.
Abandona el camino y detén el paso.
Para que nunca se vaya, Para que así, permanezca.
Prolonga el momento, Secuestra el instante.
Toma un descanso infinito
Y envuélvenos en tus brazos,
Has de esta noche una noche perpetua.
Tú mi doctor de cabecera, el que nunca falla,
El que siempre llega; evita el daño y también la pena.
Has que la felicidad perdure, Has que no desaparezca.
A ti acérrimo verdugo, de inmemorables andanzas.
Sobreviviente de antaño, conocedor del pasado,
A ti fanático de la historia te pido que hagas memoria
Y que me dejes vivir.
Vivir sin contratiempo, que para mí todo es incierto
Ten piedad de mi maestro, solo pido eso…
Que la vida viene y va, que yo voy y vengo.
Que la vida se me irá, necesito tiempo.
Impaciente y justo tiempo,
Sabio doctor y maestro…
¡Espérame que quiero alcanzarla!
PD. Prometo seré puntual.
By. skM.
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